Confinado

 

El viernes 8 de enero era un día muy especial aunque sin celebración. Por desgracia no todo es como a uno le gustaría que fuese. Fui a comer al Bar Nou de La Font de la Figuera. Me gusta mucho ir a este sitio porque aparte de que se come muy bien y los platos son caseros, suele haber poca gente y eso en tiempos de pandemia es de agradecer.

No hay menú, pero Merche suele hacer siempre un plato diario. Ahora con el frío apetecen platos de cuchara como lentejas o alubias, pero hoy tocaba arroz al horno. Delicioso y en su punto como siempre.

Los postres son otro tesoro guardado de Pepe y Merche: Tiramisú, mouse de chocolate, tarta de queso o tarta de tres chocolates hacen las delicias de cualquier comensal exigente.

Algo que pasa desapercibido en muchos sitios como es el café, aquí se puede tomar muy dignamente. No hay una cultura del café en España, como sí ocurre en otros países. Solemos devolver un plato cuando no nos ha gustado o no lo han cocinado como deberían y sin embargo, nos tomamos el café que nos sirven aunque sea aguachirri.

Tras tomarme el café, me enfundé el sombreo y me fui a casa. Me despedí de Pepe y Merche hasta el sábado.

Por la noche recibí un wasap de Pepe diciéndome que había dado positivo por Covid y que cerraba el bar unos días.

Lógicamente al haber estado yo ese día comiendo en el Nou,  dio parte al centro de salud de las personas que habían frecuentado el bar, tanto en el almuerzo como en la comida. Cuando aparece un positivo se hace un rastreo para calcular cuantas personas han tenido contacto y hacer un seguimiento.

Al decírmelo Pepe ya tenía pensado confinarme durante diez días en casa para evitar posibles contagios.

Sin embargo, hoy ha hablado con la médica del centro de salud y le ha dicho que no era necesario el confinamiento pues no había existido un contacto directo. Con carácter general se considera contacto estrecho con un positivo el permanecer sin mascarilla más de un cuarto de hora a menos de dos metros de distancia. No  se dieron ninguna de estas circunstancias, pues Pepe llevaba puesta la mascarilla en todo momento y permanecimos alejados el uno del otro   a más de dos metros de distancia. El local además siempre está ventilado. No obstante, creo que hay que tomar todas las precauciones y me quedaré en casa unos días.