Continúa la ola de calor

El calor no da tregua. Si julio fue un mes muy caluroso, las primeras semanas de agosto son asfixiantes, con temperaturas que en algunos lugares han llegado a los 45 grados. No se prevén lluvias para las próximas semanas. Algunas Comunidades Autónomas como: Galicia o Andalucía están empezando a aplicar restricciones al consumo de agua, prohibiendo regar o llenar piscinas. Medidas de ahorro energético, pero también medidas de ahorro de agua. El Gobierno debería estar trabajando en un plan de ahorro de agua en línea con las medidas que ha anunciado para ahorrar energía. Francia ya ha activado un gabinete de crisis ante la sequía que sufre el país vecino. Como dice el refrán: cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar. El agua no es solo un bien escaso sino necesario para la supervivencia de las especies. La falta de lluvias es ya un grave problema. Quizás el mayor con el que nos enfrentamos. Administrar la escasez de recursos hidráulicos es tan perentorio, o más, que controlar el uso de la electricidad. La extrema sequía ha llevado a que los embalses estén al 40% de su capacidad y en algunos casos al 15%. Si echamos mano de las estadísticas es el verano más caluroso de los últimos 27 años. Más de 500 personas han muerto en España por la ola de calor. Nunca se habían dado unas cifras de fallecidos tan elevadas por la altas temperaturas.

El cambio climático ha propiciado periodos de sequía prolongados. Veranos cada vez más calurosos con escasez de precipitaciones. Las altas temperaturas que se van a prolongar durante las próximas semanas y la falta de lluvias están empezando a afectar al campo, cuando estamos a punto de comenzar la vendimia. El calor ha adelantado la cosecha al madurar antes la uva. La semana que viene La Cooperativa La Viña de La Font de La Figuera abre la bodega para las variedades blancas que son las primeras en recolectarse. Una campaña en la que se prevén menos kilos. Según las primeras estimaciones en torno al 10%. Los racimos no han engordado lo suficiente debido a la falta de agua y las bayas se han quedado pequeñas. La sanidad, sin embargo, es buena. Peor lo están pasando los árboles jóvenes al tener menos raíz y necesitar más agua para enraizar. En mi caso es una parcela de almendros de la variedad Lauranne que planté hace un par de años. Si no llueve en los próximos días habrá que ayudarles con un poco de agua antes de que se sequen.