2021

Está a punto de terminar un año que en lo personal ha sido horrible, pero no les cansaré contándoles mis penas. 2021 ha sido un año marcado nuevamente por la pandemia que nos ha vuelto a golpear. Cuando empezábamos a ver la luz al final del túnel, llega otra variante del virus y tira por tierra todas nuestras ilusiones. Nuevo mazazo a la economía que empezaba a resurgir, tras un año de cierres en la hostelería y de restricciones, que provocó un colapso no solo sanitario sino también económico con cientos de empresas que se vieron abocadas al cierre. Afortunadamente España ha sido un ejemplo en el proceso de vacunación con cerca del 90% de la población vacunada con la doble pauta. Los mayores de 60 años ya están recibiendo la tercera dosis, fundamental para mitigar la gravedad del virus y evitar que se produzcan más muertes. La clase política, sin embargo, no ha estado a la altura de las circunstancias ni siquiera en una crisis sanitaria como la que estamos padeciendo a nivel mundial. Ni en estos momentos tan difíciles para todos han sido capaces de ponerse de acuerdo en algo. No sé que más tiene que pasar para que entren en razón y en lugar de verlo todo en términos electorales, antepongan los intereses generales y de país a los suyos propios. Estamos inmersos en la sexta ola y aunque algunos expertos apuntan a que Ómicron podría ser el fin de la pandemia, poco hemos aprendido de los errores pasados. El Gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos, con el apoyo de las fuerzas independentistas sigue dando bandazos y donde unos hablan de estabilidad y de agotar la legislatura, otros vemos grietas y fracturas difíciles de encajar. La borrasca Filomena, el volcán de la Palma, la victoria de Ayuso o el elevado precio de la luz han protagonizado las noticias de un año que toca a su fin y lo que cabe esperar es el que próximo sea mucho mejor y colme todas nuestras expectativas.